La vida es efimera y esta llena de sorpresas buenas, tambien malas. Las cosas buenas dejan recuerdos y las malas dejan lecciones, huellas, y sobretodo un amargo sabor en el alma. Pero todas estas cosas son necesarias porque sino la vida no seria vida, seria un sueño perfecto y lo único que existe en este mundo que es perfecto es Dios, él en medio de su sabiduria infinita izo que los humanos tuvieramos el poder, el poder de aprender (pequeño gran detalle que nos diferencia de los animales)
Solo se aprende de los consejos y de los errores . Los consejos se oyen todo el tiempo, aunque la humanidad sedienta de nuevas experiencias a través de todas sus generaciones a cometido grandes errores que han generado malas experiencias; a la vez de la caída se levantan de nuevo con la frente en alto, y así se tropiece veinte mil veces con la misma piedra al final, se aprende y se recupera.
Si no se conociera lo amargo ¿Cómo se diferenciaría de lo dulce?, si no se viviera aunque sea una sola vez en la vida lo horrible del dolo ¿Cómo lo diferenciaríamos de la efímera gloria de los momentos felices?
A pesar de mi corta edad he visto muchas cosas en esta vida, cosas que me gustarían y otras que no me gustarían ni para mí ni para nadie, pero que suceden más frecuentemente que las cosas buenas. He aprendido que el dolor te puede destruir pero a la vez te puede levantar del foso donde te hundieron, o donde tu mismo te hundiste, la cuestión es saber usar tus experiencias, tus recursos y tus posibilidades de manera positiva; ya que de la experiencia más amarga puede nacer la lección más grande de tu vida, o del pantano más oscuro la flor más hermosa de todas, que se alimenta de ese horrible pantano, sacando lo mejor de él para sobrevivir y conservar su hermosura. Solo es cuestión de cómo se mire y como se quiera vivir.
Vive tu vida y deja vivir (como dice un viejo refrán) para poder sobrevivir a las adversidades, recordando lo bueno del pasado, aprendiendo en el presente para disfrutar del futuro.
Poetisa MF (all rights reserved)
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